A ti.

A ti, que te lo haces de baile de disfraces cada día. A ti, que te lo montas de niña tonta en medio de una orgía. A ti, que me has ganado con un naipe marcado la partida. A ti, que te has colado en el coto privado de mi vida. A ti, que aún no sabes los besos que te caben en la boca. A ti, que has comprendido que a veces el olvido se equivoca. A ti, que has preferido vivir como si nada fuera eterno. A ti, que has compartido conmigo una almohada en el infierno. A ti, que has decidido no prestar atención a frases del tiempo. A ti, que has detenido con un beso el reloj. A ti, que me enfermas. A ti, que eres mi envenenada medicina. A ti, que vas de prisa, por miedo a que la risa se marchite. A ti, que te diviertes jugando con la muerte al escondite. A ti, que has levantado el árbol de tu nido en el tejado. A ti, que has dirigido la flecha de Cupido a mi costado.